1993. Baches de inversión
El Gobierno se ve obligado a ajustar el déficit del Estado como consecuencia de los acuerdos adoptados en el Tratado de Maastricht. En 1993 presenta el Plan Director de Infraestructuras que prevé invertir 5,4 billones en carreteras hasta el año 1997. El Plan comprende la realización de 4.900 kilómetros de autopistas y autovías y 1.800 de vías de conexión. Además, incluye un programa de acondicionamiento sobre 3.000 kilómetros de la red y un programa de conservación y explotación con actuaciones importantes en seguridad vial. Las elecciones y el cambio de partido en el poder impidieron el desarrollo completo del Plan.