1975. Años de incertidumbre
En 1975 muere Franco, y con él la dictadura impuesta desde el final de la guerra civil. Este acontecimiento produce un reajuste de toda la política nacional, que afecta por supuesto a las carreteras y no de forma muy positiva. Los gobiernos de la Monarquía tienen demasiados problemas para invertir en infraestructuras viarias. Sobre todo, porque a la nueva situación de incertidumbre política se suma un acontecimiento económico de carácter internacional: la crisis del petróleo, que comenzó en 1973 con la guerra árabe-israelí del Yom Kippur. La crisis alcanza a nuestro país con una subida sin precedentes hasta entonces de los precios del crudo que modifica todos los planes sobre infraestructuras para el transporte. La gasolina super multiplica su precio por 6.80 y la normal por 7.56, el gasóleo por 7.83. Todo ello se refleja en una caída de las inversiones, que desaparecen prácticamente para autopistas de peaje y disminuyen mucho en el resto.